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Cambio de mando en el Municipio F

Asumió el Concejo Municipal electo para el período 2015 – 2020.

El pasado sábado 11 de julio se realizó el cambio de mando del Municipio F a partir de la firma del acta de instalación con presencia de escribano público. Francisco Fleitas asumió como Alcalde del Municipio por segunda vez, mientras que Juan Bologna, Silvana Lima, Sandra González y Fernando Da Silva asumieron como Concejales/as Municipales.

La oratoria de la ceremonia estuvo a cargo de Francisco Fleitas, Juan Bologna y del intendente de Montevideo, Daniel Martínez.

En la ceremonia, realizada en el Museo y Parque Fernando García,  estuvieron presentes autoridades departamentales, nacionales y municipales, representantes de los diferentes partidos políticos del país y público en general.

En el cambio de mando se entregó a  los/as integrantes del primer Gobierno Municipal una plaqueta como reconocimiento y agradecimiento por el trabajo realizado. El reconocimiento fue para Francisco (Pancho) Fleitas, Juan José Bologna, Silvana Lima, Jorge Adán Ramos, Reynaldo (Tato) Louise, Jorge Moreira, Daniel Marrero, Ana Lacuesta, Víctor Hugo Lescano y Ruben Fernández.  También se reconoció el trabajo realizado por Ana Olivera, ex intendenta de Montevideo, y se le entregó un ramo de flores.

Como cierre de la ceremonia actúo el grupo folclórico Ceferino Namuncurá. 

 

Compartimos el discurso del alcalde electo Francisco Fleitas:

“Buenas tardes a todos y todas. Autoridades Nacionales, departamentales y municipales Gracias Compañero Intendente por visitarnos en este lugar de nuestro Municipio. Vecinos y Vecinas, bienvenidos.

Cuando llegamos a estas instancias no dejamos de pasar la oportunidad para realizar agradecimientos, pequeños balances de la tarea llevada adelante, homenajes que nunca son los suficientes y comentar el porvenir, la perspectiva.
Lo primero, y debo decir que casi nunca personalizo en estas ocasiones, es nombrar a mi familia, agradecer lo que aguantan durante todas las horas, durante todos los días y desde hace muchísimos años. Son los que siempre están, mi compañera desde hace 32 años, mis hijas e hijo tan amados, que fundamentalmente son quienes se llevan todas mis ausencias. A mi viejo, con el cual sin duda cada vez nos queda menos tiempo, pero fue el primero que me hizo mamar de la solidaridad, de la eterna entrega hacia el otro, ese viejo obrero metalúrgico que me hizo sentir los primeros olores de una fábrica, que me hablaba con tanto aprecio de sus compañeros, con el que compartimos tantas batallas en esta vida tan compleja pero llena de sabiduría, de entrega, sin soberbias, plagadas de mil batallas, con muchas derrotas pero siempre, siempre con aprendizajes.

Quiero homenajear a todas las mujeres, haciendo un especial reconocimiento a una de ellas. A la compañera Ana Olivera quien, desde cualquier lugar que le tocó estar, como madre, como hija, como abuela, como activista social y política, con responsabilidades de Gobierno, lo hace con ahínco, con cariño, con firmeza, con capacidad, con convicción revolucionaria, esa convicción que nos lleva a dar la pelea por los cambios de forma permanente, porque eso es la vida. Pasarán muchos años para que la historia de nuestra  Montevideo reconozca todo lo que hiciste por esta hermosa ciudad y quienes habitamos en ella. Sin duda en Montevideo perdurará ese hermoso perfume, la más hermosa de las aromas, que es el perfume de mujer. 

Debemos seguir dando la pelea por generar conciencia ciudadana, una sociedad sin prejuicios, con equidad, con tolerancia, con respeto.
En estos tiempos nos han querido hacer creer que llegó el fin de las ideologías. Todo es ideología y sino que alguien me explique, nos explique, nos justifique el porqué de la existencia de la desigualdad, de la explotación sexual, de la explotación infantil, de la discriminación, de la falta de oportunidades en este mundo tan hermoso, pero muchas veces tan ajeno.
Soplan brisas de esperanza para realizar los cambios tan necesarios para no seguir por el camino que nos puede hasta extinguir nuestra presencia sobre la faz de la tierra. Nuestra América Latina deberá bregar, deberá esforzarse por propiciar cambiar nuestro modelo desarrollo. Tiene las condiciones objetivas para hacerlo y debemos generar entre todos y todas quienes la habitamos las condiciones subjetivas para llevarlo adelante. Cada uno desde nuestros lugares propiciando una profundización de nuestras democracias, para que algún día la llevemos hasta sus últimas consecuencias.

En esto, los Municipios de nuestro país y sus Gobiernos juegan un papel muy importante. Mi mirada intento hacerla no desde el lugar que hoy ocupo, no creo que seamos el ombligo del mundo. Pero cuando la legislación establecida en esta materia, incluye que exista una ley, descentralización y participación ciudadana, nos da señales muy claras de cuál es su intencionalidad política.
Nos indica claramente que debemos rendir cuenta ante nuestros conciudadanos y no solo ante quienes nos representan.
Nos mandata a que debemos generar las condiciones para que el conjunto de quienes habitan en nuestros municipios nos controle, nos cuestione, se empodere, que sea parte de la resolución de las distintas dimensiones que se desarrollan en el territorio, se nos está claramente manifestando que la idea general es cambiar el modelo de desarrollo.
¿Esto lo podemos hacer solo desde los Municipios? No, claramente no.
Para esto cada uno desde su lugar y en el marco de las competencias establecidas deberemos intentar transitar este camino, buscando un objetivo común que es la pública felicidad.

Estas cosas es lo que intentamos hacer desde el Gobierno del Municipio F, con las herramientas que teníamos, con el acuerdo de las dos representaciones políticas, el Frente Amplio y el Partido Nacional, con el acompañamiento y empuje de nuestro Concejo Vecinal, con la participación del conjunto de esa gran memoria institucional que son los trabajadores y trabajadoras municipales, con muchas de las organizaciones sociales, culturales, religiosas, empresariales que están ahí, que establecen la demanda, pero que muchas veces aportan a la solución de las mismas.
Del Gobierno nacional y departamental, el ejecutivo y el legislativo, reconociendo no unánimemente, de a poco, paso a paso, que somos los Municipios parte del sistema de Gobierno de nuestro país. En el marco de un proceso que no es lineal ni parejo.

Ante lo expuesto, se viene  una nueva etapa. Los Gobiernos de cercanía consolidan y fortalecen a la comunidad de vecinos/as para que se constituyan y se vean a sí mismos como una verdadera comunidad, organizada y llena de vida.
El objetivo central de nuestra gestión es el de promover una profunda democratización de la vida social, política y económica basada en una activa participación de los/as vecinos/as.
Los Municipios somos concebidos como instrumentos al servicio de la comunidad y sus necesidades, prestadores de servicios y promotores de cultura, persiguiendo el bienestar físico, emocional y social de la población.
Sin duda que debemos estimular el sentido de pertenencia de quienes habitamos nuestro Municipio.

 

Podríamos mencionar una inmensa cantidad de actividades de las cuales hemos sido parte de una u otra forma. De esas que no son noticias, buenas noticias, pero no es el objeto de esta instancia.
De las cosas que propusimos hacer para este período las dijimos durante las distintas campañas políticas y están escritas. Serán incorporadas a las herramientas que humildemente hemos construido entre mucha gente desde distintos lugares, con distintas miradas, con distintos intereses.
En un corto tiempo seremos convocados para poder alimentar el plan municipal de desarrollo, herramienta fundamental que se trasformó en una guía para la acción cotidiana de quienes tenemos la tarea de gobernar. Es un derecho que tenemos y debemos ejercerlo.

 

Para culminar, esta responsabilidad es imposible sin el acompañamiento y el trabajo cotidiano de mucha gente. Algunos somos los más conocidos, las caras más conocidas, pero créanme que seguiremos haciendo el esfuerzo por trabajar colectivamente, porque sin la presencia activa de los Concejales/as Municipales, de los integrantes de nuestro Concejo Vecinal 9 y fundamentalmente de nuestro trabajadores/as del Municipio F y su servicio Centro Comunal Zonal 9, nada sería posible.

Por último, quiero tomarme un momento para mencionar a algunas  personas y en ellas a todos aquellos que creen en parte del mensaje que intenté transmitir
Juan Coimbra que se nos fue tempranamente y que fue un gran ejemplo.
Ana Lacuesta y Jorge Ramos, integrantes del partido nacional porque siempre fueron parte de la construcción cotidiana.
A la bancada del Frente Amplio de nuestro Municipios.
Al que me banca todas y más Adrián, mi hermano ideológico querido.
A Juan Bologna que sostuvo la bandera hasta sus últimas consecuencias.
Con Ustedes, muy juntos, sin ninguna duda, con aciertos y con errores, seguiremos caminando en la búsqueda de la pública felicidad”.